Hoy, viendo unas fotos viejas, recordé el calor. Que sensación, que cosa extraña, que locura el tiempo y el clima. El cuerpo, el cuerpo, el cuerpo. Por momentos siento que no existe otra posibilidad, que lo único que importa es el cuerpo. Que sensaciones. Que calor sentí, que agradable sentir eso con tanto frío que hace.
sábado, junio 09, 2007
jueves, abril 26, 2007
Bufido (escrito el 21/02/2007)
Es casi como si me hubiera cansado, pero ¿de que? Si nunca empecé. Tengo la sensación de no tener nada para decir. De que todo lo dice la aplastante realidad. De que me serviría hablar de los olores, de lo podrido que se mete en la nariz, ahuecándote el alma, lentamente. El amontonamiento de sudor en la ciudad, del aplastante y metálico aroma del consumo. Aunque eso es empezar algo, ¿no? Decir que esta inconformidad y a la vez este silencio por el que me dejo apabullar es un comienzo. Al menos es algo.
Hay una necesidad que aparece en mí que pasa por lo estético. No logro discernir que me preocupa más, si el contenido o lo estético. Podría desplegar algo de vocabulario, pero quiero decir cosas concretas. Aunque toda elección implica adoptar una estética determinada. Mi elección es contar lo que me pasa. Contar que está pasando conmigo y el alrededor en esta época determinada por un arbitrario sistema calendario. Eso si hablamos en el sentido del tiempo, pero en otros sentidos determinada por miles de factores. Estoy harto.
Me siento bien, pum, me siento mal. De arriba hacia abajo. Estoy con todas las pilas, toda la onda, toda la locura efusiva de la creación (no el génesis humano sino la creación de cositas, canciones, palabras combinadas) y de golpe una marea criminal y destructiva me lleva a lo más hondo de la depresión. No pasa en dos minutos, pero de una hora a otras sucede. Armo proyectos en mi cabeza, los desarmo, pienso que contemplar es lo mejor en la vida, me siento estático, deliro de acciones, vuelvo a la quietud, me relaciono con otras personas: superactivos, pasivos, reboteros, mensajeros, copiones, sinceros, viajeros, pelotudos, amarillos, colorados. Hay variedad y me siento solo.
Hay una necesidad que aparece en mí que pasa por lo estético. No logro discernir que me preocupa más, si el contenido o lo estético. Podría desplegar algo de vocabulario, pero quiero decir cosas concretas. Aunque toda elección implica adoptar una estética determinada. Mi elección es contar lo que me pasa. Contar que está pasando conmigo y el alrededor en esta época determinada por un arbitrario sistema calendario. Eso si hablamos en el sentido del tiempo, pero en otros sentidos determinada por miles de factores. Estoy harto.
Me siento bien, pum, me siento mal. De arriba hacia abajo. Estoy con todas las pilas, toda la onda, toda la locura efusiva de la creación (no el génesis humano sino la creación de cositas, canciones, palabras combinadas) y de golpe una marea criminal y destructiva me lleva a lo más hondo de la depresión. No pasa en dos minutos, pero de una hora a otras sucede. Armo proyectos en mi cabeza, los desarmo, pienso que contemplar es lo mejor en la vida, me siento estático, deliro de acciones, vuelvo a la quietud, me relaciono con otras personas: superactivos, pasivos, reboteros, mensajeros, copiones, sinceros, viajeros, pelotudos, amarillos, colorados. Hay variedad y me siento solo.
martes, marzo 06, 2007
lunes, enero 22, 2007
jueves, diciembre 28, 2006
SE VIENE EL DEMO EN EL 2007
Bueno, se está yendo el año, diferentes rumbos mononianos, unos al norte, otros al este, otros quien sabe adonde. La cuestión es que el año que viene estaremos grabando el demo, supongo. Se vienen varios cambios geo-posicionales, mudanzas y etcéteras. Termina el año, un 2006 que estuvo bueno, y un 2007 raro, como cada año que empieza. Y acá arriba, gracias a Pablito, la visión de algo simpático. La vida es un demo, amigos.
lunes, diciembre 04, 2006
jueves, noviembre 23, 2006
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